Sueños que queremos que nos engañen
Trato de responderle aquí también con la ingenuidad de quien quisiera que sus versos fueran una reflexión supuestamente filosófica sobre la realidad más que un relámpago huidizo sobre un sentimiento, un impulso o un deseo latente tras un verso.
Quizás de joven uno llegue a creer que cualquier cosa en la que uno sueña como alcanzable podría llegar a realizarse y agregarse a nuestra vida como una conquista.
Pero cuando el tiempo, estrecho o realista, nos convence de que lo soñado no es alcanzable uno se resiste a olvidarlo y lo almacena, como un engaño deseado, no sé dónde, pero sí de diversas maneras:
Como la cicatriz de una herida tal como hace tiempo intenté describir en el esfuerzo de un sueño abandonado:
“El sueño, como espada,
así hiere la vida
que ni la tierra ni el cielo
pueden ya sembrar descanso al corazón”
Como una herida abierta a modo de abismo infranqueable, tal como ya incluí en un comentario a un escrito pasado:
“El sueño divide nuestra vida en los dos labios de una herida: una siembra de distancias en los ojos que emborrona lo cercano y un verdor de ilusiones que lo encumbra. Y es que el sueño pesa y eleva como el aire que respiramos. Y la vida con él oscila desde el cielo hasta el abismo.”
Como una obligación moral de transmitir lo que uno alguna vez intuyó como posible o deseable:
“Tú, testigo del sueño,
estás ya encadenado a la palabra
que nos lo traiga.
Y a su búsqueda.”
Como el recuerdo de un deseo de aliviarnos del peso de la realidad:
“El alma que una vez estuvo presa
construye en cada instante su peldaño
para alzar la mirada que nos pesa
al sueño que tuvimos desde antaño.”
Como un lugar en que nos perdemos, tal como una vez escribía en una reflexión al espléndido poema de Rilke, Wie ein Speer (Como una jabalina):
“Yo tan sólo quería ser la lanza
que espiara de lejos las estrellas.
Nunca quise llegar de aquí hasta ellas.
Sólo quise mirar con esperanza.
Pensaba que una estrella no se alcanza
más que cuando se sueña en cosas bellas.
Sólo quise soñar sueños sin huellas...
pero surgiste tú en la lontananza
y me has lanzado lejos, sin espera.
Y corrí, loco, ansioso, hasta tus brazos.
Me he perdido en tu hielo y en tu hoguera
y ahora ya no sé donde estoy. Los lazos
que amarraban mi alma desde fuera
han soltado mis sueños, mis abrazos...”
Como una huida de la realidad no deseada:
“Cuando el sol es castigo
se hace sueño la lluvia de la tarde”.
Como el ideal rebajado por lo acostumbrado. Así lo expresaba hace tiempo:
“Ningún recuerdo ya nos estremece
ni un contacto nos dice nada nuevo.
Hace ya mucho tiempo que te llevo
como hiedra de amor que en mi alma crece.
Sueño en ti cada día que amanece,
que te veo al compás de su relevo,
que en mi sed te hago agua y que te bebo
y que tú me haces viento que te mece.
Pero el día se lleva cada sueño
o quizás nuestros sueños no coinciden
en dibujarse al tiempo sobre el ceño.
Son muchas las arrugas que lo impiden
y el tiempo hace inútil nuestro empeño
de hallar la paz que nuestros sueños piden.”
Y, para finalizar lo interminable, como una construcción etérea de lo inexistente, de ser lo que quisimos ser y ni fuimos ni seremos:
Sé muy bien que la luz de las estrellas
me está hablando de cosas que no existen
y que el mensaje de lo que son ahora
llegará cuando yo ya me haya ido.
Sé muy bien que el paisaje en que me pierdo
cuando cierro los ojos y contemplo
el cielo añil de las miradas vivas
que antaño me miraron ya no existe.
Sé muy bien que los sueños de otros mundos
que sueño que vendrán son sólo sueño
y es probable que existan solamente
en la sed que me acosa mientras ando.
Sé muy bien que el reflejo de mis ojos,
de mi piel, de mis labios es tan sólo
el sonido automático del alma
que existe sólo para hacer que existe.
Sé muy bien que el destino de mi estrella
es mandar el mensaje de mi vida
a través de distancias infinitas.
Sueño que al llegar alguien descubra
que existió alguna vez una esperanza,
una gris voluntad de estar viviendo:
ser lo que quiso ser, no lo que fue.
19 Comments:
Me despierto y creo que sueño aún cuando te leo.
Digeriré lo que has escrito poco a poco, que este ensayo sobre los sueños requiere estudio detallado y profundo.
Amigo Ybris,
después de leerte, sólo cabe una reflexión: la mejor virtud de una pregunta es a quién se le realiza
Un abrazo
El tema es asi: Solo paso a saludarte y a pedirte que me abraces un ratito :) Porque no puedo leerte ahora y seria una falta de respeto opinar leyendote de prisa.
Vuelvo, prometo volver y deleitarme con tus letras.
Muakkkkkkkkkkk Ybris.
Andy
Tan largo sueño hemos vivido que no nos queda más sueño por vivir...has vuelto con fuerza!...que delicia leerte, un fuerte abrazo y para acabar saber que los sueños sueños son..
como un pos-it en la memoria, siempre a punto de despegarse del todo, para recordarnos que no siempre fuimos así, y que no siempre lo vamos a ser
Estaba pensando en cuanta razón tiene eso que te ha dicho Carz...
Qué placer me da leerte.
Besos
y ES QUE LOS SUEÑOS, SUEÑOS SON...pero..¿quién es capaz de vivir sin sueños?...
cUANta necesidad de dicha actividad onírica...¡¡¡
Impecable, Ybris, me conmueves, que decirte...el comentario podrìa haber muerto con la pregunta, sin embargo nos sorprendes grata y enormemente con un minucioso escrito, con esta amplia variedad que me ha llevado a la introspecciòn:)
Agradezco lo que me entregas hoy, un gran abrazo.
Ya he digerido... me he quedado más que con todo, con el último verso, que resume para mí lo que somos o no somos.
Me has hecho pensar en dos cosas:
-Los sueños, los posibles y los imposibles
-Las personas, las que creen firmemente en vivir sus sueños y son capaces de cualquier locura, y las que ni siquiera sueñan.
También donde estoy yo y mis sueños.
Lo leeré una y otra vez,eres increíble.
Coincido por completo con Carz.Un abrazo,Ybris.:)
El sueño habita en el jardín de la fantasía, abonado por la vehemencia del soñador. Sueños que, como tal, son palomas etéreas que anidan entre los huecos de la ilusión.
Me ha gustado tu apología. Un saludo
Todas, todas esas posibilidades que enuncias, que enumeras, que explicas luego con versos son los sueños. Guardaré celosamente esta respuesta para que no me engañen los sueños que no quiera, amigo Ybris
Un beso fuerte
Hoy mejor me quedo con esos sueños de alrededor... esos que me muero por vivirlos con los ojos de par en par.
Besitos cantados.
"Cuando el sol es castigo
se hace sueño la lluvia de la tarde”.
Seria un sueño tener cerca a quien se expresa asi.
Un abrazo
Clasificación digna de ser realizada por la mejor bibliotecaria de Alejandría (que no soy yo, está claro!).
Haré contigo lo que no hice en su día con los Beatles...te pediré un autógrafo!.
Sé muy bien que sabes, que los sueños son quimeras del intelecto, que nos hacen huir hacia delante con el planteamiento "absurdo" de conseguir una realidad tangible,que si se alcanzan, dejan de ser lo que en un principio se soñó; surge entonces el concepto de "lo que en sueños vive, despierto muere" ...Aún así y a pesar de que sabes(sabemos) dejemos que a veces los sueños "fabriquen" nuestros plateamientos para que, una vez despiertos, podamos morirnos de risa, y así seguir viviendo en paz...si es que Hipnos, nos lo permite.
Un abrazo
Yo quiero un sueño tranquilo donde beber el agua de cada tiempo. Cada tiempo tuvo su lugar en un sueño anterior. Pero sueño y tiempo no ligan bien.
Un besote.
Como una resurrección : Creerse muerto un día y volver a nacer.
Un abrazo.
..."Los lazos
que amarraban mi alma desde fuera
han soltado mis sueños, mis abrazos...”
Sueño que quiero un sueño que no me engañe. Como un lugar en el cual perderse para encontrarse.
Un abrazo, Ybris.
In
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