Lugar en que uno crea un mundo inexistente a partir de su propia inexistencia con la fuerza vital de la existencia de todos los que quieren existir.
posted by ybris at 5:43 a. m.
Siempre he sido persona comprensiva acaso porque siempre he sido raro. Nunca quise aspirar a lo más caro, sino sólo a un lugar de vista esquiva donde sin molestar dejen que viva, que por otros cuidados no me azaro. Inútil fue escapar del mundo avaro y del gran capital con mente altiva. Saben bien el peligro que supone el insensible a toda propaganda que no cree además en loterías ni envidia las riquezas de Al Capone. Por eso me dijeron que a quien manda le fastidia que le hagan poesías... Quede claro. Siempre tomé partido por el llamado bien común, hallado al margen de las leyes del mercado que es la ley del más fuerte. Sólo pido un sistema que salve del olvido a aquellos que la suerte ha abandonado y son sólo el destino desastrado que humilla la cerviz con el despido. No quiero que un privado beneficio defina mi trabajo y mi futuro por caminos que marcan unos locos. Y si no necesitan de mi oficio, permitidme que espere tras mi muro el triunfo de muchos contra pocos.
32 Comments:
Te ha quedado precioso, pero no me convence nada.
Nuestras son las victorias de las batallas pero la guerra es suya.
Besos
Esos dos primeros versos me han vencido: me rindo a tu poema, definitivamente. Un beso
¡Qué la victoria se prolongue por muchos años!, y que sea fructífera en nuestros actos...
Y como dijo Miguel Hernández... "Cantando espero a la muerte/que hay ruiseñores que cantan/encima de los fusiles/y en medio de las batallas".
Un abrazo.
Me has dejado muy pensativa
Volveré a comentarte
Ahora quiero reflexionarte...
besos
No sé qué es triunfar, ni para qué sirve.
En esta nueva mañana febril (de febrero), mi victoria sería un abrazo.
Aquí tienes el mío.
Ajá, eso es... de momento y que nos quiten lo bailao también luego.
Un beso vital!
Así es, cada día que vivimos es una victoria. Cada día. Recuerdo que mi abuela paterna era plenamente consciente de eso, y me lo expresaba.
Un beso
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hablas de 'infligir' y de 'humillación', dos palabras que cuando la muerte repta destroza, vivamos como vivamos.
¿Cómo sino daría respuesta tu poema optimista al de Santa Teresa:
Vivo sin vivir en mí,
y tan alta vida espero,
que muero porque no muero. ?
(Ya sé que tienen un cariz muy distinto.)
Besos.
De momento seguimos siendo triunfadores, y al segundo de su llegada, dejará de ser importante, que se fastidie la parca.
quiero morir cuando decline el día,
en alta mar y con la cara al cielo,
donde parezca sueño la agonía
y el alma un ave que remonta el vuelo...
Sería bonito si así fuera, como este fragmento de un poema de Gutiérrez Nájera.
De cualquier manera, que siga almacenando derrotas.
Un abrazo, Ybris.
Es sólo este instante, nada más. Bien entendido como siempre en tus versos.
Vivir con paso firme y mirando al frente... luego cuando llegue el momento, que nos quiten lo "bailao"
Un beso
Como voy en su camino desde el momento de mi existencia.
Trataré de honrar la vida mientras pueda.
Besos Ybris.
De momento sigamos victoriosos, que ya se encarará ella, dama muerte, de nuestra mayor derrota.
Un abrazo.
Celebremos la victoria cada día.
En la derrota ya no estaremos para penarla ¿un nuevo triunfo?.
Besos
Sobre todo si sabemos disfrutar el triunfo de cada día como merece.
Cierto.
Fijate que nunca lo había mirado así!
Ybris, genio :))
Besos!
la victoria al ego, lo que el pan al hambre
Es una paradoja!! Como la de Gödel. La muerte humillada..., haga lo que haga, siempre pierde.
Chuff!! (Brillante!!)
Claro que no.
Te ha quedado hermoso.
Un (b)eso y una victoria
Definitivamente Maestro es un placer leerlo.
Saludos
como no se que decirte....te dejo un beso
lo he leido 3 veces... a cual más me ha gustado... vivamos pues... de eso se trata....
Un abrazo amigo. marea@
Vine ayer, no dije nada. Vuelvo hoy... a aprender a vivir un día más. Ella? tiene una cara de asco que no se pué aguantar: que le vayan dando!.
Y, como no, vengo a mandarte un beso.
Ya te digo amigo. Uno solo de nuestros días, incluso el peor, vale más que ella, al fin y al cabo, lo de ella es UNOS SEGUNDOS, después, el MÁS ALLÁ, la REENCARNACIÓN, ó la NADA, son los vencedores.
A qué tanta arrogancia, la muerte apenas existe uno o dos segundos.
Besos
eso, y que nos deje contar a nosotros! no hay plazos, solo presente.
Es un triunfo cotidiano y, minusvalorado, el de la vida: cada mañana es un viaje sin retorno que aprovechar, un dia para reír aunque sea una vez, o para lo que sea; cualquier cosa menos tener que vérselas con ella cara a cara. Esa guerra siempre es mejor perderla por factor sorpresa.
Besos...y que nos pille bailando o durmiendo.
M.M.
El triunfo ha sido encontrarte.
La victoria, leerte.
Noble poema, amante y orgulloso de vida. El mañana no puedo robarnos el hoy, sea cual sea ese mañana. Menos aún la muerte, que ni siquiera es un mañana.
De verdad pienso que no es la muerte la enemiga de la vida, pero yo es que estoy algo loco.
Un saludo, Ybris.
Apuesto yo también por esa victoria. Y de hecho es una victoria que se alarga durante muchos momentos de nuestra vida. En equilibrio o en contraposición, la muerte sólo goza de su victoria un único momento que al final también se olvida.
... ando hundida en pensamientos que no piensan...
Igual.. hasta la victoria siempre.
Precioso...
Siempre batallas con la muerte, siempre estas presentándole tu rostro, incluso cuando acecha impunemente....y aún sabiendas de su triunfo, posees fuerza suficiente. Leo tu Coraje en cada letra.
Olimpia.
Publicar un comentario
<< Home